Sueños europeos, a veces se cumplen y otras no.


Si hablamos de fútbol internacional este fin de semana debemos referirnos casi obligatoriamente a la final de la UEFA Champions League. Todos vimos la victoria del Real Madrid en la prórroga ante el Atlético y para no pecar de mainstream vamos a atender otro tema bien relacionado. Hasta el minuto 92 el Atlético de Madrid estaba en posición de inscribir su nombre en el elitista grupo de los equipos campeones de Europa. En esta escueta lista se encuentran los gigantes europeos que todos tenemos en mente, Bayern Munich, Real Madrid, Manchester United, Milan, Barcelona, Ajax… y el Nottingham Forest.

El equipo inglés ha desaparecido desde hace años del primer plano del fútbol internacional pero hace años consiguió ser campeón de la Copa de Europa, y no sólo una vez sino dos. Este hito es muy meritorio porque el equipo de Nottingham nunca ha sido un grande de Inglaterra, de hecho ha pasado casi el mismo tiempo en la máxima categoría como en la segunda. Eso sí, es un histórico y fue el primer equipo en vestir oficialmente de color rojo, llegando incluso a convertir al Arsenal a estos colores al regalarle unas equipaciones del Forest a los jugadores gunners.

El club de los Midlands del este fue fundado en 1865, ganó dos FA Cups y vio como cambió su historia en 1975. Ese año fue cuando llegó al club Brian Clough, el legendario entrenador inglés. En 1977 el Forest consiguió el ansiado ascenso a la máxima categoría del fútbol inglés y, contra todo pronóstico, ganó el título de liga el año siguiente. Este triunfo le valió al club para disputar por primera vez la Copa de Europa en la temporada 1978/79. Sorprendentemente el equipo iba superando rondas, e incluso eliminó al Liverpool, ganador de las dos últimas ediciones. Partido a partido llegaron a la final de Munich. En el Olympiastadion les esperaba el Malmö sueco, dirigido por el inglés Bob Houghton. Los suecos también eran debutantes pero disponían de un equipo temible, el mejor de su historia. Al final, un solitario gol de Trevor Francis sirvió para que los ingleses se llevaran la Copa y los suecos las lágrimas. Ese mismo año el Forest logró el subcampeonato inglés y la temporada siguiente volvió a disputar la Copa de Europa como campeón vigente. La magia continuó y el equipo de Clough llegó a la final de Madrid, donde derrotaría al Hamburgo de Felix Magath y Kevin Keegan para ganar su segundo trofeo. Curiosamente el Nottingham Forest es el único equipo que ha ganado más Copas de Europa que ligas nacionales.

El momento que vive actualmente el Forest no hace justicia al equipo de Brian Clough. Después de dos años luchando por el ascenso a la Premier League la temporada pasada se descolgó hasta la posición 19, peligrando su continuidad en Championship. Este año ha mejorado prestaciones con Stuart Pearce en el banquillo y ha terminado undécimo. No obstante no es un buen resultado para un equipo que tiene uno de los mayores presupuestos de la categoría y que solo contaba con dos rivales claramente superiores a ellos, el Queens Park Rangers y el Wigan. Su mejor jugador esta temporada ha sido el irlandés Andy Reid pero en sus filas se encuentran dos jugadores que asistirán al Mundial de Brasil, el chileno Gonzalo Jara y el argelino Rafik Djebbour. Veremos si en el nuevo proyecto el equipo propiedad de la familia kuwaití Al-Hasawi es capaz de recuperar una categoría en la que debería estar por ser miembro fundador de la primera liga inglesa y de la primera Premier League.