Francia, muchas incógnitas sobre sus posibilidades
Francia siempre muestra
una gran irregularidad en la Copa del Mundo. Después de una gran actuación
muestra su peor cara en la edición siguiente. Ganó en el 98 y no pasó de
primera fase en 2002. En 2006 fue finalista y otra vez cayó en primera fase en
2010. Si sigue con la dinámica nos esperaría otra gran actuación en Brasil pero
no son las sensaciones que se desprenden del juego del equipo de Didier
Deschamps.
La llegada del nuevo
seleccionador trajo consigo una mejora del nivel de juego y la competitividad
pero no parece suficiente para derrotar a las grandes potencias futbolísticas.
La primera prueba de fuego será en una fase de grupos que se presenta muy asequible
a priori. Suiza, Ecuador y Honduras no deberían suponer problemas excesivos
para los galos, al menos las dos americanas. Los octavos ante el grupo F
también son factibles si no cae como rival Argentina. Veremos hasta donde
pueden llegar.
¿Cómo llega?
Decir que Francia sufrió
para llegar a Brasil es quedarse corto. Cayó en un grupo con España, Finlandia,
Georgia y Bielorrusia. Solo los españoles eran un rival de entidad y Francia
fue incapaz de ganarles un partido. Ya fueron su bestia negra en cuartos de la
pasada Eurocopa y una derrota en casa ante la Roja condenó a los franceses a la
segunda posición del grupo. En la repesca contra Ucrania el equipo de Deschamps
estaba más fuera que dentro después de perder 2-0 como visitante pero un 3-0 en
casa les dio el pase in extremis hacia Brasil.
Los amistosos han dejado
más sombras que luces en una selección demasiado irregular. Las buenas
victorias ante Holanda, Italia y Australia no compensan las dolorosas derrotas
ante Brasil, Alemania, Uruguay y Japón. Aún si Deschamps consigue insuflar
cierta regularidad el equipo parece un peldaño por debajo de los grandes,
aunque en un torneo como la Copa del Mundo nunca se sabe.
El equipo
El seleccionador
Deschamps ha ido modificando su dibujo táctico buscando un patrón de juego que
fuera competitivo. Ha probado con un 4-2-3-1, un 4-4-2 y el que parece el
elegido, un 4-3-3 con un único pivote, interiores físicos y extremos abiertos a
banda. Los jugadores de banda son los encargados de generar peligro haciendo un
dos contra uno con la ayuda de los laterales. Las llegadas de segunda línea son
claves para aprovechar el peligro generado en bandas.
La portería es para Hugo
Lloris. Lo protegen los centrales Mangala y Varane, con Koscielny de
alternativa. En banda derecha jugará Debuchy y en la izquierda Evra, dejando a
Sagna y Clichy en el banco. Como organizador está Cabaye y por delante los
protegen Matuidi y Pogba. Arriba Valbuena jugará por la derecha y Ribéry por la
izquierda dejando la punta de ataque a Benzema.
El muro
La pareja Mangala –
Varane debe ser la defensa titular de la próxima década en Francia. Si su
rendimiento está acorde a las expectativas serán casi infranqueables. Ambos
centrales son jóvenes y con proyección pero con un rendimiento de jugador
experimentado. Quizás Varane es el que genera mayores expectativas con su 1’91
que le permite tener un gran juego aéreo y una buena técnica con el balón en
los pies. Una lesión de rodilla lo ha penalizado esta temporada pero ya está
recuperado y listo para la máxima exigencia.
La estrella
La mayoría pensaría que
el rol de estrella debería caer en Ribéry pero él no es el único que ha hecho
méritos para merecerlo. El joven jugador de la Juventus Paul Pogba es el otro
crack de esta selección. Lleva dos años siendo clave en los títulos de la
Vecchia Signora y su rendimiento mejora día a día. A su descomunal trabajo
físico en la línea de medios hay que añadirle un buen olfato de gol y capacidad
para asistir a sus compañeros. Sus llegadas de segunda línea son mortales y su
1’88 le ayuda a imponerse en las jugadas de estrategia. A sus 21 años ya no es
una promesa sino uno de los mejores jugadores del mundo.
El gol
Aunque esta tarea debería
ser cosa del delantero centro ni Karim Benzema ni Olivier Giroud han rendido
demasiado bien. Suerte ha tenido Francia que el extremo Franck Ribéry se haya
puesto el equipo a las espaldas y se haya encargado de marcar los goles que
otros no hacían. El menudo jugador del Bayern Munich es eléctrico e incansable.
Desborda constantemente por banda izquierda y busca el disparo con su pierna
diestra, aunque domina las dos por igual. A sus 31 años esta es su última gran
oportunidad de recordar el impacto que tuvo en Alemania 2006.
Posible convocatoria
Porteros: Lloris
(Tottenham), Mandanda (Olympique Marsella) y Ruffier (Saint-Éttiene).
Defensas: Varane (Real
Madrid), Mangala (Porto), Koscielny (Arsenal), Debuchy (Newcastle), Evra
(Manchester United), Sagna (Arsenal), Clichy (Manchester City) y Sakho
(Liverpool).
Medios: Cabaye (PSG),
Matuidi (PSG), Pogba (Juventus), Nasri (Manchester City), Sissoko (Newcastle) y
Mavuba (Lille).
Delanteros: Ribéry
(Bayern Munich), Valbuena (Olympique Marsella), Benzema (Real Madrid), Giroud
(Arsenal), Griezmann (Real Sociedad) y Payet (Olympique Marsella).